martes, junio 13, 2006

LA NOCHE MAS BELLA DE NORTEC

LES DEJO LA RESEÑA DE LO QUE PASO EN EL PALACIO DE BELLAS ARTES... QUIZA MAÑANA PONGA ALGUNAS FOTOS.

Nortec hechizó a Bellas Artes.

El colectivo Nortec fue parte de la que ya es considerada una noche histórica en la inauguración del Encuentro de las Artes Escénicas

La noche del 1 de junio de 2006 ha quedado grabada en la memoria de muchos mexicanos que se hicieron presentes en el interior y en la explanada del Palacio de Bellas Artes en la Ciudad de México. Esa noche, México se convertía en la Puerta de las Américas a propósito del III Encuentro de Las Artes Escénicas, que se llevarán a cabo desde la noche de anoche hasta el 4 de junio.

La inauguración tenía un atractivo especial pues más allá de la presencia de Jazz Trío, Onix Ensamble y Delfos, Danza Contemporánea, se contaba con la participación del Colectivo Nortec completo (Bostich, Clorofila, Fussible, Hiperboreal y Panóptica), interpretando su música (un delicioso encuentro de melodías e instrumentos norteños con construcciones, sonidos y evoluciones de la música electrónica, la raíz y la vanguardia mexicana) acompañados de una banda.

Después de la participación de Jazz Trío (Eugenio Toussaint, piano, Agustín Bernal, bajo y Gabriel Puentes, batería), de la aparición de Onix Ensamble y de Delfos, una buena parte de la gente dentro del Palacio y de mucha más en la explanada -en donde los mismos integrantes del colectivo habían colocado pantallas de video y sistema de audio para que la gente pudiera disfrutar de lo que ocurría adentro-, estaba en espera de la participación de Nortec.

16 músicos de banda, acordeones, guitarras y 5 muebles simulando un guacal grande en donde se colocaron las lap tops del colectivo aparecieron bajo la ovación de los admiradores y la incredulidad de la gente mayor, que no sabía muy bien a dónde se dirigía el evento.

Nortec abrió su participación con “Olvídala compa”, una canción de su más reciente disco Tijuana Sessions Vol. 3 y el acordeón en directo llenó las esquinas de un Palacio que estaba apunto de vivir el encuentro de una de las músicas populares más emblemáticas de México, con la propuesta de principios de siglo (Nortec comenzó en 1999) de músicos como Bostich y Panóptica que jugaban con esos sonidos de banda sinaloense y música norteña, en los discos duros de sus computadoras.

El resultado desde aquellos años fue una mezcla inteligente, viva, fresca, auténtica y completamente mexicana que se convirtió en la verdadera abanderada de la música del nuevo siglo de este país. Y fue precisamente esa mezcla la que comenzó a retumbar en las paredes del edificio y en los corazones de los cientos de personas que miraban todo en la explanada, debajo de una estupenda noche primaveral.

Fueron sólo seis canciones, pero fue también la coronación de una propuesta que, para variar fue apreciada primero fuera del país. Nortec estaba tocando en el mismísimo Palacio de Bellas Artes ante su propio público, demostrando que la vida cultural de este país no es exclusiva de la Ciudad de México y que Tijuana hierve en propuestas artísticas. La tuba, la redoba, los huiros, las trompetas, el acordeón, la banda en pleno, se ajustaba a los sonidos y a las capas de audio que salían disparadas de las máquinas del colectivo en una estupenda simbiosis, en una muestra realmente emotiva de música orgánica, de comunicación artística.

La música de Nortec sonaba quizá más potente, quizá más cercana. Lo que es seguro es que estaba más viva, tanto que por momentos, la banda se adelantaba en el ritmo y los chicos Nortec tenían que contenerlos para que la música volviera a la coherencia. La actitud Nortec también se veía más potente y desde la ropa hasta las miradas de satisfacción del colectivo, se notaba que la música nueva debía y estaba ocupando por fin, un lugar en eventos y recintos como ese. Por ello es quizá mayor el mérito de haber colocado esas pantallas afuera del Palacio por parte de Nortec, quienes desembolsaron de su propio dinero para que esto fuera posible. El pueblo estaba recuperando la propuesta, primero a través de la música, después a través de la actitud.

Esto se puede considerar como un éxito del Encuentro, del Palacio de Bellas Artes y por supuesto de Nortec, que cerraron con una emocionante y explosiva versión de su clásico “Polaris”... ¿cuándo habían visto a la gente bailando DENTRO de Bellas Artes?

Los objetivos del III Encuentro de las Artes Escénicas, México: Puerta de las Américas son insertar a México en los mercados de artes escénicas y fortalecer la estructuración de los mismos a nivel nacional e internacional como una opción más para los grupos artísticos de nuestro país; propiciar un diálogo entre las fundaciones mexicanas y extranjeras en torno a la inversión estratégica de las artes escénicas y su contribución a la sociedad, así como provocar la reflexión sobre la construcción de redes de información.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

El concepto de Nortec es simplemente excepcional me siento orgulloso de ellos. Recuerdo que la primera vez que los vi en vivo fue en un Vive latino alla por el 2001 o 2002 y su propuesta me atrapo por completo, la mezcla de tambora, banda sinaloense y musica norteña y el techno es grandiosa.